En un mundo cada vez más consciente de la importancia de la sostenibilidad ambiental, económica y social, la inversión en terrenos destinados al desarrollo territorial sostenible se presenta no solo como una oportunidad de negocio prometedora, sino también como un compromiso con el futuro de nuestro planeta.
¿Qué es el Desarrollo Territorial Sostenible?
Para que un desarrollo territorial sea considerado sostenible debe considerar, al menos, las dimensiones económicas, sociales y ambientales.
Esto implica hacer un análisis de la situación que presenta hoy el territorio y si ha sufrido o no modificaciones a lo largo del tiempo. Mirar con perspectiva esta evolución te permitirá hacer un correcto análisis sobre su competitividad económica, cohesión social, sostenibilidad ambiental e implementación de políticas públicas que hagan un uso planificado del suelo y sus recursos desde entidades municipales y gubernamentales.
El visualizar la trayectoria de los territorios, uso de suelo, decisiones de infraestructura y cuidado del patrimonio cultural como medioambiente, es el primer paso para detectar si estás frente a un proyecto de desarrollo territorial sostenible o no.
Entonces, es clave que el desarrollador o inmobiliaria esté alineada a las políticas públicas de promoción del desarrollo territorial y tenga la capacidad de proponer estrategias de acción para su correcta implementación.
Por qué invertir en este tipo de proyectos:
1. Alineación con tendencias globales de sostenibilidad
Las iniciativas de desarrollo sostenible están alineadas con las tendencias globales y los objetivos marcados por organizaciones internacionales. Invertir en terrenos que promuevan un uso responsable de los recursos naturales y un impacto ambiental mínimo asegura que los proyectos estén en sintonía con las expectativas y regulaciones actuales y futuras, brindando una ventaja competitiva en el mercado.
2. Demanda en aumento por viviendas y espacios sostenibles
La conciencia ecológica y la demanda por proyectos y espacios que respeten principios de sostenibilidad están en aumento. Los consumidores, cada vez más informados, buscan opciones que minimicen su huella de carbono y promuevan una mejor calidad de vida. Los terrenos de desarrollo territorial sostenible ofrecen la base para proyectos que responden a esta demanda creciente, asegurando su relevancia y éxito a largo plazo.
3. Responsabilidad social corporativa
Para las empresas, la inversión en desarrollo territorial sostenible refleja un compromiso con la responsabilidad social corporativa. Esta inversión no solo mejora la imagen y reputación de la compañía sino que también contribuye al bienestar de las comunidades locales y al desarrollo económico de manera ética y sostenible.
4. Resiliencia frente a cambios climáticos
Los proyectos de desarrollo territorial sostenible suelen incorporar prácticas y tecnologías diseñadas para ser resilientes ante los efectos del cambio climático, como la creciente desertificación de suelos. Esto asegura la viabilidad y sustentabilidad de la inversión a largo plazo, protegiéndola contra los riesgos asociados a fenómenos climáticos extremos y cambios en el entorno natural.
Invertir en terrenos de desarrollo territorial sostenible es invertir en el futuro. Más allá de los beneficios económicos inmediatos, esta inversión representa una oportunidad para liderar el cambio hacia un desarrollo más sostenible, ético y responsable.
Analizar dónde pondrás tu capital no solo asegura el retorno de tu inversión, sino que también contribuye a la construcción de un mundo mejor para las generaciones futuras.